La resurrección de Jesús es un hecho teológicamente denso y complicado. Aquí simplemente vamos a sugerir algunos de los matices que tiene para nuestras vidas, en forma de oración. Es más un "misterio" ante el que asomarnos humildemente, disfrutar, y dejarnos llevar por Su Vida, la de Jesús muerto y resucitado. Una vida diferente, transformada, alegre y eterna.

Un amigo mío, Fernando Moreno Muguruza, sj, nos explicaba a los jóvenes qué era eso tan raro de la "vida eterna" de una forma muy sencilla: "La vida eterna no es otra vida que sólo se vive después de muertos, una especie de promesa ambigua que nunca podremos comprobar si existe. La vida eterna comienza ya ahora, si vivimos como Jesús quiere que vivamos. Es verdad que creemos que se prolonga después de la muerte, pero Jesús nos ha prometido que ya podemos disfrutar del "cielo" aquí en la tierra, viviendo con Él y como Él. La vida eterna es, simplemente, la vida que merece la pena ser vivida. Y por eso se prolonga eternamente."

Te proponemos dos textos, de Francisco Luis Bernárdez e Isidro Cuervo, que se pueden entender desde la clave de la resurrección; y un vídeo con la famosa canción de Amaral. ¡Que los disfrutes junto al Señor de la vida que merece la pena ser vivida!

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