Seguimos orando con las parábolas que Jesús nos relata en el evangelio. Mediante las parábolas, Jesús nos habla con un lenguaje cercano, que nos ayuda a ponernos en el lugar de los personajes, y de esta manera, poder entender y sentir mejor lo que nos quiere transmitir. Con la parábola de los talentos, Jesús intenta explicar cómo es nuestro padre Dios, y cómo puede ser nuestra respuesta a su invitación a participar de su Reino.

«Un hombre, al irse de viaje, llamó a sus empleados y los dejó encargados de sus bienes: a uno le dejó cinco talentos de plata, a otro dos, a otro uno, a cada cual según su capacidad; luego se marchó.
El que recibió cinco talentos fue en seguida a negociar con ellos y ganó otros cinco. El que recibió dos hizo lo mismo y ganó otros dos. En cambio, el que recibió uno hizo un hoyo en la tierra y escondió el dinero de su señor. (Mt. 25, 14-18)