
Por eso desde esta página queremos haceros llegar un deseo sencillo para el nuevo año. Desde el corazón y porque creemos que es de lo mejor que podréis recibir:
Que en este año nuestros deseos de conocer más a Dios y de que ocupe un lugar importante en nuestra vida vayan en aumento. Que nunca nos falte la sed de Dios. Y si nos falta, que tengamos la fuerza para pedir que crezcan en nosotros nuevos deseos de estar a su lado.