La oración es el espacio en el que mi corazón se transforma. La mayoría de las veces de manera imperceptible. Pero el tiempo me va enseñando que estos momentos de oración me ayudan a que mi corazón entre en sintonía con el modo en que Dios mira el mundo y con el modo de ser de Jesús. Por ello, dedico unos minutos a serenarme, a que mi corazón se pacifique y se disponga a recibir el abrazo del Señor.









Acompañamos con la canción Tu Modo (Cristóbal Fones)