En estos días de confinamiento en casa, te proponemos una oración que te pueda ayudar a vivir este tiempo especial poniendo tu tiempo y tu realidad en las manos de Dios. Puede ser también un buen momento para ponerse en el lugar del otro, porque en estos momentos en que se me pide un “sacrificio” para erradicar la pandemia durante unos días, me puedo dar cuenta de que hay personas que tienen que hacer este “sacrificio” todos los días, y no lo hacen de forma puntual por la llegada y expansión de un virus. Es su día a día. Yo, si todo va bien, lo sufriré unas semanas, o quizás unos meses. Esto me pone en relación con la fragilidad que siento. Me pone en contacto con la vulnerabilidad, lo fácil que es echar abajo las estructuras de nuestro día a día.



Nada os preocupe. Antes bien, en vuestras oraciones y súplicas, con acción de gracias, presentad a Dios vuestras peticiones. Y la paz de Dios, que supera la inteligencia humana, custodie vuestros corazones y mentes por medio del Mesías Jesús. (Flp. 4, 6-7).


Acompañamos la canción "Gracias a la vida" interpretada por Mercedes Sosa.